Juan's day

Juan had a great birthday yesterday. We started, as I have mentioned already, with an Almada tradition: breakfast in bed. We woke him up singing "Happy Birthday" and gave him hugs, breakfast and a gift that his grandma had sent.

After he came back from school, they picked me up at work and took me to Weightwatchers, as it was my 'weigh in' day. To my relief, I hadn't gained any (though I didn't lose either). I left WW without staying for the meeting, because we had plans...

We took the kids to the mall with the excuse of us needing to go to the Dollar store to buy some stuff for the birthday party. The tricky part is that there's a movie theatre there, so we suddenly announced that we were going to go watch "The bee movie". We had a lot of fun, it was a very nice movie.

We left 'home' and nobody complained about not having dinner out, as they know how hard it is for us to take the kids out. They all assumed that going to the movies was good enough, but they were wrong. We pretended that we had to go to the gas station, and with that excuse we stopped at Benny's (Juan's favourite place, and also mine!). We all had one of those burgers that you remember for months (except Santi who had wings), and the waiter told him that he could go a pick a dessert for free.

At that point, Juan was overwhelmed. He thanked us countless times, and soon tears started to fill his eyes. He just couldn't believe what was happening to him. That's when we gave him yet another gift, $20.00 for him to spend on whatever he wanted. Juan cried a little and said he didn't think he deserved all that, because he wasn't a good kid most of the times (that self esteem problem again). We told him that it wasn't true, he is a great kid that sometimes makes bad choices, but all kids do. We were doing all that because we all loved him and he totally deserved it. Besides, he is doing very well at school, so there were many things to celebrate.

Enjoying dinner at Benny's. Look at Juan's face, he was about to cry...

We finished our meal and Juan ordered his cake, which he shared with his siblings. He kept thanking us, and saying "this is my best birthday ever".

I wish we could make you feel like this more often, Juan. But don't worry, I have been doing this "Dad" job for almost 13 years, logic tells me I should start getting better at it soon...

Juan went to bed being the happiest kid in the world last night. And we were too, just for knowing that we could do that for him.

Juan tuvo un gran cumpleaños ayer. Como mencioné, su día comenzó con una tradición Almada: el desayuno en la cama. Lo despertamos cantándole "Feliz Cumpleaños" y le dimos abrazos, desayuno y un regalo que su abuela le había enviado.

Una vez que volvió de la escuela, me pasaron a buscar por mi trabajo y me llevaron a Weightwatchers, porque era mi día de pesaje. Para mi alivio, no subí de peso (aunque tampoco bajé). Salí de WW sin ir a la reunión, porque teníamos planes...

Llevamos a los chicos al mall con la excusa de que teníamos que ir al "Todo por un dólar" a comprar cosas para la fiesta del cumpleaños. La treta es que en ese mall hay un cine, así que de repente anunciamos que íbamos a ir a mirar "The bee movie". Nos divertimos mucho, la película estaba muy buena.

Salimos en dirección a casa y nadie se quejó de no poder ir a cenar afuera, porque saben cuánto nos cuesta hacer estas cosas. Todos asumieron que como ya habíamos ido al cine, no había más presupuesto, pero esta vez se equivocaron. Pretendiendo que teníamos que ir a llenar el tanque del auto, paramos en Benny's (el lugar favorito tanto de Juan como mío). Comimos una de esas hamburguesas que se recuerdan por meses (excepto Santi que comió alitas) y la chica que nos atendió le dijo a Juan que podía elegirse un postre gratis.

A esa altura, Juan estaba sobrepasado por los hechos. Nos agradeció innumerables veces, y pronto se le empezaron a llenar los ojos de lágrimas. No podía creer que todo eso le estuviese pasando. Justo en ese momento le dimos otro regalo, $20.00 para que los gastara en lo que quisiera. Juan lloró un poco y dijo que el no pensaba que se mereciera tantas cosas, porque muchas veces el era un chico malo (otra vez ese problema de la autoestima). Le dijimos que eso no era cierto, que él era un gran chico que a veces tomaba decisiones incorrectas, pero que todos los chicos lo hacían. Nosotros estábamos haciendo todo esto porque lo queríamos y el se lo merecía. Además, este año le está yendo muy bien en la escuela, así que había más de un motivo para celebrar.

Terminamos nuestra cena y Juan pidió su porción de torta, la que compartió con sus hermanos. Siguió agradeciéndonos y repitiendo "éste es el mejor cumpleaños de mi vida".

Ojalá pudiéramos hacerte sentir así más seguido, Juan. Pero no te preocupes, llevo casi 13 años trabajando de "Papá", así que la lógica indica que ya debería empezar a mejorar...

Juan se fue a la cama anoche siendo el niño más feliz del mundo. Y nosotros también, sólo de saber que pudimos hacer eso por él.

Be a Fan