A rant about fear

I wouldn’t say I’m afraid of a lot of things. In fact, I think that I have conquered most of those fears I used to have in the last decade or so. I went through events that definitely changed my life and the way I look at things: within five years (between 1995 and 2000), I was in a big car accident and spent almost half a year in bed, then I had three kids, and finally I took my wife and the kids and moved to the other side of the world. Nobody can go through so much without being affected in many ways.

In my case, I think that all these events generated a positive -and needed- change in me. I became more assertive and more confident in myself, in my skills and my abilities. More importantly, my self esteem grew and I got better at standing for myself when other people tried to diminish me or my work. I think of that disgusting -though brilliant- person I worked with back in the days, who made my life miserable and even went all the way to get other people to join her cause (and it was easy for her; there's a say in Argentina that goes almost like this: 'a female pubic hair pulls stronger than a yoke of oxen'). This group ended scheduling a meeting with my boss to talk about all the problems they were having with me; my boss told them he would talk to me in private, which he did. We sat down and he jokingly said to me: “Gordo, what the hell are you doing that I had these guys coming over to whine for an hour about how evil you are!”  We then laughed and proceeded to talk about soccer. Important stuff, you know.

But going back to this topic, I would never be in a situation like that today: I would have confronted this person (and her acolytes) and told them to go to hell. I will never know what happened to this girl; we were on a business trip along with five more co-workers and she had been very nice to me from the beginning. Suddenly, she hated my guts. Whether it was jealousy, a non-reciprocal crush, just pure craziness, I will never know. But I would lie if I said it didn't affect me. I couldn't understand why someone could despise me like that, I never felt I had done anything to her. For the next few years, and in spite of the many friends who told me not to worry, to fight back, etc, I just kept on second guessing myself and was extremely careful not to get in these people's way. What a waste of time and energy, they weren't worth two minutes of my time! But it was just my fear of confronting these people what made my life miserable. Again, that would definitely not happen to me today.

I have gotten over it, like many other fears. A few of them remain, though, and some torture me. The biggest one is the fear of dying. I don't think there's a day in which I don't think about it. But not because of what that would mean for me. What would happen if I died soon? What would happen to my family? How would they all go on without me? I know I'm not indispensable (nobody is), but I know my demise would be a huge blow for all of them. How would my little Florencia grow up without her daddy? How would Juan go through the transition from childhood to adolescence without me?

The questions go on and on: Who would dance with Caro on her Sweet Sixteen party? Who would walk her down the aisle? Gosh, the idea of missing that makes me sick. Not being there to watch Santi succeed at whatever it is he decides to do (I have no doubts he will), I would just hate that. Same with Gaby, we've fought so hard and for so long, and for me not to be alongside her as she's finally spreading her wings and succeeding on her own... that'd be so bad!

There is nothing I can do to avoid croaking due to unforeseen circumstances (I don't know, a plane crash or something), but I know there is something I can do to prevent this from happening due to other reasons, like health. Like most obese people, I might have little will power or self image, but I have something much more powerful than that: a family that loves me, depends on me and would definitely like having me around for a longer time.

It's about time I stopped looking for excuses and get my act together. I shouldn't be thinking about going on a diet or getting in better shape for 'the right reasons'.

I must do it. For the right people.

Source: Methods of healing

 

 

Diría que no soy una persona que tenga miedo a muchas cosas. De hecho, creo que he conquistado la mayoría de mis temores en la última década y media o algo así. Pasé por cosas que definitivamente cambiaron mi vida y la forma en la que la encaré desde entonces: en el lapso de cinco años (de 1995 a 2000), tuve un accidente automovilístico muy serio que me postró por casi medio año, luego tuvimos tres niños, y finalmente me llevé a esos niños y a mi esposa al otro lado del mundo. Nadie puede pasar por tanto sin ser afectado en muchas maneras.

En mi caso, creo que todos esos eventos generaron un cambio positivo -y necesario- en mí. Me torné más agresivo (en el buen sentido de la palabra) y confiado en mí mismo, mis conocimientos y mis habilidades. Más importante aún, creció mi auto estima y me puse más serio a la hora de ponerle un freno a aquellos que trataban de disminuirme a mí o a mi trabajo. Recuerdo aquella horrible -aunque brillante- compañera con quien trabajé hace unos años, que no sólo me emputeció la vida sino que también reclutó a otros para su causa (y le fue fácil por eso de que 'un pelo de c***** tira más que una yunta de bueyes'). Este grupejo hasta terminó pidiendo una reunión con mi jefe para contarle todos los problemas que tenían conmigo; mi jefe les dijo que iba a hablar conmigo en privado, cosa que hizo. Nos sentamos y me dijo en tono de broma:“Gordo, qué carajos estás haciendo que tuve a estos tipos llorándome por una hora lo maligno que sos!” Nos reímos y luego seguimos hablando de fútbol, que es algo mucho más importante.

Pero volviendo al asunto, sería imposible que yo me viera en una situación como esa hoy: ya habría confrontado a esa persona (y sus discípulos) y los hubiera mandado a todos al diablo (qué fino me puse). Jamás sabré qué fue lo que le pasó por la cabeza a esta chica; estábamos en un viaje de trabajo junto con cinco compañeros más y pasó de tratarme lo más bien un día a odiarme profundamente al día siguiente. Si fue por celos, porque me tenía ganas (ja) o porque estaba completamente loca, jamás lo sabré. Pero mentiría si dijera que no me afectó. No podía entender cómo alguien podía odiarme tanto, si yo estaba seguro de no haberle dado motivo alguno. Por un par de años y hasta que me fui, y a pesar de los consejos de mis amigos que me decían que no me preocupara, que la enfrentara, etc, perdí toda seguridad y me cuidé muy bien de no hacer nada que afectara a esta gente. Qué desperdicio de mi tiempo y mi energía, esta gente no valía ni media puteada! Pero bueno, era mi miedo a la confrontación lo que estaba haciendo mi vida laboral tan miserable. De nuevo, eso no sucedería ahora. Por menos que eso mandé a pasear a unos cuantos ya.

Me he sobrepuesto a esto, como lo hice con otras cosas a las que temía. Pero aún tengo algunos miedos, y hay algunos que me torturan. El más grande es el miedo a morir. No creo que haya un día en el que no piense sobre esto. Pero no por lo que podría significar para mí. Qué pasa si me muriera? Qué le pasaría a mi familia? Cómo se las arreglarían sin mí? Yo sé que no soy indispensable (nadie lo es), pero sé que si yo 'espichara' sería un golpe muy grande para todos ellos. Cómo haría mi Florcita para crecer sin su papá? Cómo pasaría Juan la transición de niño a adolescente sin tenerme a mí al lado?

Las preguntas siguen y siguen: Quién bailaría con Caro en su fiesta de Dulces 16? Quién caminaría con ella cuando se case? La idea de perderme todo eso me descompone. Imagino no estar allí para ver cómo Santiago triunfa en lo que sea que decida hacer (no tengo dudas de que así será), qué feo sería. Lo mismo que Gaby, hemos peleado juntos tan duro y por tanto tiempo, y que yo no esté cuando ella finalmente está despegando y teniendo su muy merecido reconocimiento... qué feo sería!

No hay nada que yo pueda hacer para evitar crepar debido a circunstancias fuera de mi control (qué sé yo, accidente de avión, algo así), pero sí sé que hay algo que puedo hacer para evitar que esto pase por otras razones, como mi salud. Como la mayoría de los obesos, yo podré tener muy poca voluntad, pero tengo algo mucho más poderoso que eso: una familia que me quiere, depende de mí y que definitivamente apreciaría que yo me quede por acá por unos años más.

Es tiempo ya de que me deje de buscar excusas y me ponga serio. No debiera estar pensando en hacer dieta o ponerme en forma por 'los motivos correctos'.

Es mucho más simple que eso. Lo tengo que hacer por las personas importantes en mi vida.

Source: Imperfect Action

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