Embarrassing moments
It was during this past weekend that my I had my last embarrassing moment. We were all doing our work from a training, connecting to the servers remotely. In order to ensure that none of us was going to pass out and wake up with a 'QWERTY' face, we had purchased lots of snacks, but most importantly, energy drinks (I liked the tiny '5 Hours' ones; they didn't taste great, but I least I wouldn't have a crash a few hours later, like it happens with 'Red Bull' and others).
Our customer had just told us that we would need to clean up the entire room on Tuesday, because we wouldn't have it available the following day, to which I replied 'Sure, don't worry. I will take care of that'. About 30 seconds later, I picked up my can of Diet Coke, and it slipped through my hands (clumsiness that can be blamed on me being tired, since it was about 5:30 AM).
The can bounced on my desk and fell right on top of the keyboard I was using, splashing it with a refreshing wave of Diet Coke. I cursed (in Spanish), picked it up and held it upside down to drain it, all of this trying to look as casual as I could. I unplugged the keyboard and grabbed many napkins, sticking them in between the rows of keys; once I was unable to obtain any more Diet Coke samples, I simply placed the keyboard upside down on the floor, and continue working as if nothing had happened.
Our software has a 'sticky keys' feature, so I could have claimed that I wanted to test that!
Corpus delicti
Fue durante ese fin de semana que viví mi último (hasta ahora) momento de vergüenza. Estábamos todos trabajando en una sala en la que normalmente se dictan cursos, conectándonos a los servidores en forma remota. Para asegurarse de que ninguno de nosotros fuera a 'volcar' y despertarse con la palabra 'QWERTY' escrita en la cara, habían comprado montones de snacks, pero aún más importante, montones de bebidas energéticas (a mí me gustaron unas que se llaman '5 hours'; no eran riquísimas pero al menos no me mataban dos horas después del 'sugar high' como pasa con las 'Red Bull' y otras).
Nuestro cliente nos había dicho que había que dejar todo limpio el martes, porque no íbamos a tener la habitación disponible al día siguiente, a lo que respondí 'Por supuesto, no hay problema. Yo me ocupo de eso'. Unos 30 segundos más tarde, fui a levantar mi latita de Diet Coke, y se me escapó de las manos (la torpeza puede ser atribuída a mi cansancio, porque eran como las 5:30 AM).
La latita rebotóen el escritorio y cayó bien encima del teclado que estaba usando, bañándolo con una refrescante ola de Diet Coke. Puteé (en riguroso español), levanté el teclado y lo puse patas para arriba para secarlo, todo esto mientras trataba de lucir lo más casual posible. Desconecté el teclado y agarré un manojo de servilletas que había por ahí, insertádolas entre las hileras de teclas; una vez que no pude obtener más muestras gratis de Diet Coke, simplemente puse el teclado boca abajo en el piso, y continué trabajando como si absolutamente nada hubiese pasado.
Nuestro software tiene una función que se llama 'sticky keys' (literalmente 'teclas pegajosas'), así que bien podría haber dicho que estaba testeando eso!
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