Embarrassing moments
Here is my second embarrassing moment related to blood. And it ends pretty much like the first one! This one happened in June of 1982. Even more, it was on the 23rd. I'll tell you later why I know exactly what day it was.
I had just come back from school and was ready for lunch. Everybody was at home that day: my mom, my stepdad and my then three brothers. At the end of our lunch, my stepdad decided to have some wine, and I offered to open the bottle, though I had no idea of how to do it.
Inserted the corkscrew, pulled up.... and I heard a 'crack' instead of a 'pop'. I looked and yes, I had opened the bottle, but there was a big chunk of glass missing from the bottle.
I found it very soon, though. It was lodged in my hand! The pain was just incredible!! By pure chance, there was a doctor in the house, as my brother Paco (then 4) had a fever. This doctor took me to the bathroom, turned on the water, opened my hand, extracted the chunk of glass and put my hand under the water. One detail, though: he had only opened the hot water...
When I came to, I was in my bed, and somebody was giving me a glass of orange Crush. A few minutes later, they took me to the clinic, where they did their best to close that wound. There was no need to do anything with the bump I had in my forehead, probably the product of hitting the sink on my way down...
Many years have passed and my right hand is extremely sensitive in that area. I was told I nicked a nerve, so that might explain why. I'm also still very mad about the whole thing, because I missed what turned out to be a great game: Cameroon vs Italy, for the FIFA World Cup.
Which is -of course- the reason why I remember what day it was when this embarrassing moment occurred... :-)
He aquí mi segunda historia avergonzante relacionada con la sangre. Y termina más o menos como la primera! Esta ocurrió en Junio de 1982. Más aún, fue el 23 de Junio. Luego les diré por qué sé cuál fue el día exacto.
Acababa de volver de la escuela y estaba listo para almorzar. Estábamos todos en casa ese día: mi madre, su esposo y mis entonces tres hermanos. Luego de comer, mi padrastro decidió tomar vino, y yo me ofrecí a abrir la botella, a pesar de que no tenía la menor idea de cómo hacerlo.
Inserté el sacacorchos, giré, tiré y… escuché un ‘crack’ en lugar de un ‘pop’. Miré y sí, había abierto la botella, pero faltaba un pedazo de vidrio bastante grande el pico.
Enseguida lo encontré. Estaba enterrado en mi mano! El dolor era increíble!! De pura casualidad, había un doctor en la casa, porque mi hermano Paco (que entonces tenía 4 años) estaba con fiebre. El doctor me llevó al baño, abrió el agua, abrió mi mano lo más que pudo, me sacó el trozo de vidrio e inmediatamente puso mi mano bajo el agua. Un detalle, sin embargo: sólo había abierto la canilla del agua caliente…
Cuando recobré el sentido, estaba en mi cama y alguien me estaba dando naranja Crush para que tomara. Unos minutos más tarde me llevaron a la clínica, donde hicieron lo que pudieron para coserme esa herida. No hubo necesitad de tratarme por el golpe que tenía en la cabeza, sin dudas de haberme golpeado con el lavabo cuando iba camino al suelo…
Muchos años han pasado y mi mano derecha sigue siendo muy sensible en ese área (entre los dedos pulgar e índice, justo donde se pliega la palma cuando alquien cierra un puño). Me dijeron que la herida afecto un nervio, así que tal vez eso lo explique. Pero yo sigo enojado porque por culpa de todo esto me perdí lo que resultó un muy buen partido: Camerún vs Italia, por el Mundial de Fútbol en España 1982.
Lo que es –por supuesto– el motivo de que me acuerde tan bien de cuándo me sucedió este ‘papelón’… :-)
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